Suprasensibilidad

Por motivos aun por mi mismo desconocidos, hube dejado empolvarse este sitio virtual, tanto que ya hasta blanco de temibles, avasallantes y demoledoras críticas ha sido. Ahora, provisto del tiempo que necesito para cabilar con calma y una a una todas las ideas e ideotas que cruzan por este cerebro humano injerto a mi ser entre medula y craneo, es momento para replantear un verdadero y poco menos subjetivo "comienzo"

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"No es del espacio de donde debo extraer mi dignidad, sino de la disciplina de mi pensamiento. No tendría yo más poseyendo tierras; por el espacio, el universo me comprende y me devora como un punto; por el pensamiento yo lo comprendo."

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"La grandeza de un hombre es grande por saberse él miserable. Un árbol no se sabe miserable.

Saberse miserable es, entonces, serlo; pero ser grande es saber que se es miserable."

Pascal, Blaise.

¿Que si esto es un llamado a la cordura?

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Lo que se acostumbra denominar como sentimientos, que en esencia orgánica no son mas que un coctel de reacciones químicas inmediatas que tienen lugar al interior del organismo humano producto de la secreción de sustancias diversas, constituyen en conjunto, sin temor a errar, la manifestación natural e involuntaria que da lugar a las mas variadas y pintorescas situaciones en el transcurso de la vida humana, sin las cuales la historia se desenvolveria en un redondel de insípido aburrimiento.


Los eventos de amor y desencuentro, engarzadas pasiones y profunda plenitud que de forma inexplicable se tornan en trágicos y lamentables escenarios donde, mas allá de predominar esa enigmática sensación de total correspondencia y conciencia de reciprocidad, impera la vara del egoismo y la patología enfermiza que ésta acarrea. La auto-insuficiencia de abandonar una forma individual [individualista] de pensamiento, que se traduce en el mundo de la realidad consumada en una incapacidad de transformar en hechos lo que insensatamente emana de la boca, como flujos de aire que perecen inmediatamente despues de ser exalados.


Para aquellos que le rinden culto al dios de la felicidad... esa sensación se experimenta por momentos y se alimenta de la reflexión inmediata y posterior, la felicidad no es un objeto encontrable en el uno o en la otra, la felicidad es una forma de vida y no un simple dientes hacia afuera. No es posible concebir ulteriormente un epilogue que desborde en risas y buenos deseos si todo lo inmediatamente anterior, que ya marchito se encuentra, es ahora devorado por una plaga de indiferencia y conformismo. La naturaleza no reverdece si se le riega con ruegos y reclamos. Los reproches son inutiles.


¿Donde quedó la grandeza y la inspiración?


El hubiera en la lingüistica constituye un término metafórico que conecta, por medio de una tremenda tautologia, a las palabras del mundo real con un mundo intangible, inefable, que no puede ser explicado porque no se conoce, porque no existío. El hubiera ha de ser grabado en la lápida de la flor marchita y derroida, a modo de póstumo reclamo, esperando que así esta renazca de su putrefaccíón orgánica, de su extinción.

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"Nada es mas raro que la verdadera bondad; incluso aquellos que creen poseerla sólo tienen, en general, complacencia y debilidad."

de La Rochefoucauld, François

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Solo el resplandor cósmico de tus pupilas es capaz de iluminar el comienzo de un nuevo dia.