[...]
Ex ante la caida del atardecer, el sudor brota y escurre por cada poro que el soplo del viento incesante se esfuerza por cerrar. El momento de divisarte ha llegado, y el bombeo de sangre experimenta un ascenso palpable en la arteria principal donde mi sangre brinca y revolotea. Aquella sutil dosis de adrenalina y fuego fluye libremente por mi humanidad como aquel día. La impaciencia de mi inconciente dirige la trayectoria de tus pupilas en la misma que las mias describen. Hemos fundido nuestras miradas.
...Sublime...
En medio segundo, todo ha vuelto a la calma. Existimos en la realidad de este planeta, todo es cierto. Los párpados casi envuelven mis ojos una vez mas...
G
R
A
C
I
A
S
No comments:
Post a Comment